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#5 Lxs enemigxs de Julita Salmerón. La casa patas abajo

Hola, ¿qué tal?. Antes de nada, si no has visto el video documental “Muchos hijos, un mono y un castillo” de Gustavo Salmerón, estás tardando. Bien porque es una joya que no debe pasar desapercibida y bien porque te permitirá conocer el por qué de este artículo.

Julita salmerón, dueña y reina de su casa (y de todo lo que ella contiene) es la representante de muchas personas con la enfermedad de la indecisión. Incapaz de decidir si algo carece de utilidad y debe ocupar un huequito en el cubo de la basura.  A (casi) todos nos pasa: tendemos a la acumulación de objetos obsoletos pensando en ese día futuro en el que podremos volver a utilizarlo. Julita va un paso más allá, y es que según retrata el documental utilizan hasta una nave en desuso para acumular, muy y mucho.
Por eso, si lo tuyo no es la drástica decisión de “esto lo tiro que no sirve para nada” hoy te presentamos un servicio que puede servirte de gran ayuda. Es más, si lo tuyo, por el contrario, es la ley y orden, la organización hogareña y cada cosa en su sitio, puede que también descubras cómo sacar partido a tu talento.

Para encontrar un poco de razón histórica a todo este tema debemos remontarnos a la masiva incorporación -afortunada- de la mujer al mundo laboral la figura de ‘ama de casa’ va desapareciendo. La tarea recae en el miembro de familia que más tiempo pase en el hogar o más dotes disponga hacia tal ejercicio. Pero además cada vez más personas viven solas, los tipos de familia varían a su libre albedrío y sus horarios y hogares más de lo mismo. Actualmente existen empleos con jornadas descontroladas, viviendas del tamaño de habitaciones y muchas, muchas cosas en oferta y heredadas que “es una pena deshacerse de ellas”. Hasta nuestra amiga IKEA ha lanzado una sección que denomina “orden en casa”.

Actualmente existe una profesión dedicada a organizar hogares, estanterías, hacer hueco y tirar lo inútil (o dar o donar, que las segundas oportunidades a veces, son buenas). Una de las mayores infuencers en este área es Marie Kondo, una japonesa que decidió hacer de su pasión su profesión ya que, desde niña, sentía un extremo amor (y satisfacción) por ordenar y organizar las estanterías de casa y las de sus compañeros de colegio. Actualmente ha vendido millones de copias de sus cuatro libros y es protagonista de un reality que se incorporó recientemente a Netflix: “Tyding up with Marie Kondo” dónde enseña y pone en práctica el método Konmari.

Pero todo este boom americano y japonés no ha dejado indiferente a España, de hecho existe la AOPE (Asociación de Organizadores Profesionales de España) cuya presidenta, María  Gallay, nos recomienda “aprender a tirar”. Además, aunando marca españa y savoir faire de Marie Kondo contamos con la gallega Vanesa Travieso. Embajadora de la organizadora japonesa, se formó con ella en Estados Unidos y actualmente dirige una empresa con sede en Barcelona llamada “Pon Orden” dónde pone en práctica su método. Pero no todo son buenas opiniones, y es que la cultura oriental nos se equipara a la occidental. Hay más precursoras de esta profesión que discrepan en ciertos tips de la japonesa, como organizar los bolsos uno dentro del otro (ya que no puedes verlos todos a la vez) o la falta de poner en práctica estas acciones también en la cocina (ya que los japoneses parten de una organización en este área como ninguna otra cultura).



Pero ¿dónde está el orgien del problema?. Quizás pasa por arquitectos e interioristas que habrán de prestar más atención a los espacios servidores dotándolos de muebles y estructuras dignas de un buen almacenamiento, tarea que no es nada fácil (pues depende de cada individuo y sus ritmos de vida). O bien podemos hablar del extremo opuesto: lo minimal de lo minimal. La sencillez del espacio como ley, obligándonos a conservar lo necesario y desechar lo que ya no sirve. Y es que para acumular hay que saber hacerlo bien y para eso tenemos programas de Callejeros o manuales de arte Barroca. A lo mejor la posible solución recae en estas genias de la organización y en sus megacapacidades espaciales ya que lo de acumular es cultural, patrimonio mundial de la humanidad.

Y tú, ¿podrías hacer de esto una profesión? o por el contrario ¿necesitas contratar a alguien que organice tu hogar?.
Feliz acumulación y léenos muy pronto.
Estudio Salpichirri.

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